Vamos a ver, no entiendo como puede una persona querer mostrar su incultura sin ningún tipo de pudor. Si de música habláramos y alguien me dijera que Beethoven es lo más, Los Beatles los únicos o que después de Juan Pardo no ha habido ningún otro cantante más. ¿Que pensaríamos? Pues eso, lo que estamos pensando: un dudoso gusto, una limitación en los conocimientos, en las capacidades, y en los intereses.
Si alguien me ofrece como final de una conversación una frase tan insustancial como ésta, no me pongo ni siquiera a pensar en los miles de libros sobre arte, arquitectura, moda, interiorismo, pintura, artesanía, museos, colecciones, estilos, mobiliario, complementos, decoración, etc. Me suelo quedar pensando en las decenas de revistas que mensualmente educan nuestro gusto y que tan coloridas adornan los kioskos.
Por favor, antes de volver a hablar, gástese 3 € en una revista “sobre gusto” y se le abrirá un infinito desconocido mundo.
Ante: Sobre gustos no hay nada escrito.
La respuesta es: Lo que hay es poco leído.
2 comentarios:
A mi la frase, más que sacarme de mis casillas, me suele producir un gran retortijón.
Para que se vayan aleccionando, los malditos bastardos (Tarantino), un librito que lo explica todo:
"Las Oscilaciones del Gusto" de Gilo Dorfles.
Aunque les aviso que con buen gusto se nace, como guapo o feo, alto o bajo, rico o pobre, simpático o antipático; asi que cuando te ven guapo, alto, rico y simpático terminan diciéndote que -claro- sobre gustos no hay nada escrito!!
ºLº
...siempre un placer conocer los matices que aportas.
Se aprecian bien tus taninos y ese regusto ácido que perdura en boca.
un abrazo.
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